Hay que viajar en el tiempo hasta el siglo XVII, momento en el cual las ruinas visibles del teatro romano serían utilizadas como improvisada plaza de toros. Aprovechando el semicírculo existente con las llamadas "siete sillas", se levantó, en su parte opuesta otro semicírculo a fin de constituir el primer ruedo conocido de la ciudad. En 1977 se concede a la ciudad de Mérida, mediante una Real Orden, permiso para realizar cuatro corridas de toros, cuyos beneficios se invertirían en la construcción de un cuartel para alojar a los soldados que se aposentaban en las casas de los vecinos.
Foto: Revista Foro
Al fondo, podemos observar la parte superior del teatro, y el monumento todavía enterrado.
Cabe recordar en el año 1780 la actuación del célebre matador de toros argentino Manuel Ceballos, más conocido por "el Indio". En el siguiente grabado, obra del pintor Francisco de Goya vemos al matador encima de un toro intentando rejonearlo.
EL SECRETO MEJOR GUARDADO DEL TEATRO
Etiquetas: Teatro Romano | author: AugustaEmeritaPosts Relacionados:
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2 comentarios:
Excelente e interesante post. Desconocía éste hecho. Gracias por cuanto expones. Saludos.
A vosotros por leer.
Saludos.
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